jueves, 29 de julio de 2010

29 DE JULIO DE 2000



Debe entenderse que todos somos educadores. Cada acto de nuestra vida cotidiana tiene implicancias, a veces significativas. Procuremos entonces enseñar con el ejemplo.

2 comentarios:

  1. Que la carta final de Favaloro haya sido olvidada es una de los signos más claros de que la Argentina está terminada. 10 años sin cabeza (mendez) nos dejaron sin corazón. Un gran beso.

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  2. Favaloro es, a la vez, el espejo de lo que creemos que deberíamos ser y de lo que somos.

    Estamos empecinados en demostrarle al mundo que se puede hacer una colmena con puro zángano. Y no se puede.

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