lunes, 28 de septiembre de 2009

Algo patológico


No hubo un segundo en donde no te idealice.
Sabía que el encuentro era una desventura, un despilfarro, una cagada.

No obstante, pasaban los días y la intensidad con la que te extrañaba era casi inhumana.
Era como estar en un desierto y que el cuerpo me pida agua, eras una necesidad fisiológica, eras nutritivo para el funcionamiento de mis órganos vitales; eras algo casi patológico.
Y después de nuestros encuentros mediocres, descuidados, nos dejamos de ver.
Te cuento esto a vos, como si vos no lo supieses. Es irónico.
Todo es irónico, desde el amorío que forjamos hasta la despedida inexistente.
Porque dos personas se despiden cuando primero se dan la bienvenida y que yo sepa (y si me equivoco, por favor corregime) nunca fui bienvenida en tu vida.
Ni siquiera pudiste fingir ese romance engañoso que yo quería formar para volar un rato.
Volar un rato, no exactamente con vos, volar e irme por ahí.Conocer los horizontes, los confines, darme  tiempo y espacio. Situarme en la lejanía, irme tal vez a una montaña y que el eco por lo menos te diga lo que siento. De todos modos, no es necesario que ningún eco te explique nada.
Supiste, siempre supiste. Desde el comienzo hasta el final, que la balanza pesaba más del lado izquierdo- o sea de mi lado-. Pero era intrascendente en ese punto de la historia, quién amaba más.
Los sentimientos siempre son diversos y más si se ama como yo. Más si míseramente te rogaba que en la calle me des el dedo menique y lo negabas con total terquedad. Me explicabas que no era por desamor si no porque el eco te había ido con el cuento de que vos eras simplemente un capricho


lunes, 21 de septiembre de 2009

14 de septiembre de 1920 - feliz cumple


No me atrevo a juzgarte. Sé que cuando uno ve las cosas desde fuera, cuando uno no se siente complicado en ellas es muy fácil proclamar qué es lo malo y qué es lo bueno. Pero cuando uno está metido hasta el pescuezo en el problema ( y yo he estado muchas veces así), las cosas cambian, la intensidad es otra, aparecen hondas convicciones, inevitables sacrificios y renunciamientos que pueden parecer inexplicables para el que sólo las observa.Ojalá que la pases bien, no superficialmente bien, sino bien de veras. Ojalá te sientas a la vez protector y protegido, que es una de las más agradables sensaciones que puede permitirse el ser humano.Así que no te juzgo; no puedo juzgarte; más aún,me gustaría mucho que hubieras acertado y te acercaras lo más posible a la buena suerte ( LA TREGUA)

El primer cumpleaños que no pasas acá, en la tierra. De todos modos confío que estás mejor donde estás. Te extraño por siempre, algún día nos vamos a conocer Mario

El mejor, lejos!

domingo, 13 de septiembre de 2009

Último encuentro


Me percibe y clava su mirada en mis pupilas/intenta penetrarme.
Me observa imperceptiblemente.
Hasta que decido mirarla.
                                La miro
Y no es lo suficientemente intrépida como para sostener la mirada. No es audaz
Marca territorio apoyando su pierna cuasi desnuda sobre la mía. No deja que la toque
La beso por emergencia. Sus labios vacilan más que ella misma. Su hermosura es caprichosa, inusual.
Me insinúa, quiere que nunca más la olvide, quiere que llegue a casa y sueñe con ella, quiere que me levante pensando en su pierna, en su mirada y en los besos que no le pude dar. Quiere estar pero no. Quiere desparecer para dejarme inquieto
Quiere perpetuar en mi cosmos.
Pretende morderme sin dejar ninguna cicatriz.
Jacqueline Golbert

domingo, 6 de septiembre de 2009

Quiénes somos

Quienés somos
qué pasa
qué extraña historia es esta
por qué la soportamos
si es a nuestra costa
por qué nos soportamos
por qué hacemos el juego

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Bolero


Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Es cierto que es así:
todo lo mío te lo doy, es cierto,
pero todo lo mío no te basta
como a mí no me basta que me des
todo lo tuyo.

Por eso no seremos nunca
la pareja perfecta, la tarjeta postal,
si no somos capaces de aceptar
que sólo en la aritmética
el dos nace del uno más el uno.


Por ahí un papelito que
solamente dice:

Siempre fuiste mi espejo,
quiero decir que para verme tenía que mirarte.