Yo no puedo, disculpáme. Describírtela sería una perdida de tiempo, un despilfarro sin sentido; porque debería usar adjetivos que califiquen su persona y eso es complicado. Porque si te la describo como yo la veo (muy subjetivamente) de modos todos me vas a pedir ejemplos. Así que si te sirve, te la explico con ejemplos.
Un día me trajo un bonsái de regalo y yo no sabía que cara poner pero me reí y le di un beso. Yo en ese entonces estaba complicado; había terminado una relación que me había partido la cabeza en cien pedazos y ella no preguntaba nada y yo necesitaba que pregunte. Ella reía, reía y reía.
Siempre me sorprendía con detalles que nunca nadie antes había usado para sorprender. Otro día llego con un hámster y me dijo “feliz cumpleaños”. Y ese día no era mi cumpleaños y cuando se lo dije me respondió con un “ya lo sé” y no di vueltas sobre el asunto y acepté en condición de jefe-subordinado.
Tal vez si te digo esto, cuando digo que es “rara”; “especial” me puedas entender.
Yo te la regalo ahora, te la cedo...pero que no te sorprenda. Ya está, ya te di ejemplos. No dejes que te enloquezca.
Y cuando la conozcas te va a pasar lo mismo que a mí. Te va a parecer irrisoria pero fundamental; va a llegar tarde a todos lados y va a bajar de cualquier transporte público con una sonrisa de oreja a oreja y va a ser imposible e innecesario que te enojes porque con la sonrisa que te regala te alegra todo el día.
Ah! Una vez me regalo un cenicero enorme con cara de cocodrilo; sabiendo que odio los animales y que encima no fumo.
Un día me trajo un bonsái de regalo y yo no sabía que cara poner pero me reí y le di un beso. Yo en ese entonces estaba complicado; había terminado una relación que me había partido la cabeza en cien pedazos y ella no preguntaba nada y yo necesitaba que pregunte. Ella reía, reía y reía.
Siempre me sorprendía con detalles que nunca nadie antes había usado para sorprender. Otro día llego con un hámster y me dijo “feliz cumpleaños”. Y ese día no era mi cumpleaños y cuando se lo dije me respondió con un “ya lo sé” y no di vueltas sobre el asunto y acepté en condición de jefe-subordinado.
Tal vez si te digo esto, cuando digo que es “rara”; “especial” me puedas entender.
Yo te la regalo ahora, te la cedo...pero que no te sorprenda. Ya está, ya te di ejemplos. No dejes que te enloquezca.
Y cuando la conozcas te va a pasar lo mismo que a mí. Te va a parecer irrisoria pero fundamental; va a llegar tarde a todos lados y va a bajar de cualquier transporte público con una sonrisa de oreja a oreja y va a ser imposible e innecesario que te enojes porque con la sonrisa que te regala te alegra todo el día.
Ah! Una vez me regalo un cenicero enorme con cara de cocodrilo; sabiendo que odio los animales y que encima no fumo.